domingo, 19 de febrero de 2012

Mi novia es táctil



Tengo nueva novia. Y es táctil. Como el iPad.
La conocí por Internet, en un chat de dietas exprés, de ésas con las que es posible adelgazar 20 kilos en un par de meses como si nada. No es que me haga falta, pero siempre me ha gustado fantasear con la posibilidad de desaparecer, y el adelgazamiento instantáneo es lo que noto más cercano a la inmaterialidad provocada. Por eso frecuento este tipo de entornos malsanos y mis últimas novias han sido más bien tirando a gordas; o gordas, directamente.
Hasta ésta. Es decir, también es gorda; muy gorda, de hecho.
Pero es diferente, porque es táctil. Como el iPad.
En justicia, también hay que añadir que es bastante fea: lo peor no son esos pómulos hundidos y bañados por las secuelas de una viruela mal curada, ni sus ojos, de roedor minúsculo y con un ligero principio de estrabismo que más que seducir, despista; ni los paquidérmicos pabellones auditivos; en realidad concluí que la fealdad era su característica más notable cuando me percaté que la nariz tenía el tamaño y la forma de un calabacín pequeño. No me di cuenta inmediatamente, porque las capas de maquillaje marrón que obstruían la respiración de su epidermis distrajeron mi atención hacia la enorme cicatriz de la frente (un lifting casero, sin duda).
Su personalidad tampoco va conmigo, porque es superficial, caprichosa, mandona, reprimida y sabelotodo; y este último defecto lo explota de forma exagerada a pesar de su absoluta incultura en todos los temas ajenos a las comedias románticas protagonizadas por Jennifer Aniston. El sexo conmigo, además, le da asco, algo de lo que me percaté la primera y única vez que nos acostamos, y ahorro detalles escatológicos.
Además, creo que es de derechas, aunque todavía no lo he confirmado.
Pero daría igual, porque es táctil. Como el iPad.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Buena crítica hacia lo táctil, lo moderno, que nos domina y atrae; aunque no sea ni útil ni agradable. Muy sarcástico, a tu estilo

Ficticia dijo...

Muy agudo y lo digo yo, que escribo desde un Ipad.

 
Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.