Don de lenguas
El reconocido investigador Joseph McAllen, vecino de Fremont, Nebraska, ha desarrollado un método para aprender idiomas a través del tacto. Se trata de una revolucionaria experiencia de asimilación de conocimientos y neutralización de sinsabores que cuenta ya con cientos de simpatizantes en todo el estado a pesar de que la proverbial mesura del promotor le ha llevado a esquivar toda maniobra de márketing y aledaños comerciales. También, sin embargo, le han llovido críticas provenientes de numerosas academias de enseñanza de lenguas extranjeras, así como del pastor episcopaliano James Broughton III, que ha visto en el logro de McAllen una maniobra herética y merecedora de censura inmediata y consecuente destrucción. “Tal don debe estar en manos del Espíritu Santo, de su viento recio y sus lenguas de fuego”, ha declarado Broughton.
Tras este hallazgo de McAllen, Fremont se ha convertido en la primera localidad de los Estados Unidos con diez habitantes completamente políglotas. Sara Coen, vecina del lugar (aunque natural del condado de Laramie, Wyoming), presume de hablar de manera fluida cinco lenguas, gracias a lo cual ha encontrado novio en Olomouc, Chequia, lugar al que piensa acudir en vacaciones de Navidad. John Stuart, también habitante de Fremont, está en el proceso de asimilar el conocimiento de un séptimo idioma (el Hakka), aunque el caso extremo pertenece a Phillip Johnson, natural de Fargo, Dakota del Norte, quien ya se expresa perfectamente en quince lenguas y varios dialectos. “Desde que empecé ya no puedo parar”, afirma Johnson, camionero de profesión y miembro del club de artillería del estado de Nebraska.
Joseph McAllen piensa desarrollar este mismo método táctil en otras disciplinas, como la plasma astrofísica, la taxonomía de Linneo y el álgebra de Lie, pero no espera tanta repercusión entre sus vecinos. “Nunca habría imaginado tanto interés por el aprendizaje de idiomas en Nebraska”, manifestó McAllen antes de tocar en la espalda a este reportero, que aprendió cingalés de forma inmediata y que se ve en la obligación de abandonar el frío norte americano por las paradisíacas playas de Sri Lanka.
18 comentarios:
Brutal. Me recuerda al falso no-do de los Simpson. Puro surrealismo. Los Coen pueden estar tranquilos.
Mi trabajo consiste básicamente en explicar "cositas" y resultar de ayuda a extranjeros. Los europeos del norte normalmente dominan el inglés, pero en ocasiones eso no es así, y me las veo y deseo para entenderme con polacos, checos, búlgaros...
He fantaseado toda mi vida -ahora ya en mi adultez más que una fantasía sería un puntazo- con "la pastillita de los idiomas".
Porque realmente, usando una expresión que aprendí de una amiga mejicana, es "cagante" tener la barrera idiomática, siendo todos de la misma especie.
Escribes muuuuuuy bien, FER.
Tan surrealista que asusta.
José Roberto Coppola
Qué bien me vendría algo así ahora que he vuelto a sumergirme en la batalla idiomática...
Espero que tengamos pronto un libro tuyo, tanto talento necesita ser plasmado en papel, ¡YA!
Mark Ryden :)
Por un segundo me he tragado que la noticia era real. Qué pena. En cuanto a estudiar idiomas, lo mejor es la constancia, créeme. Yo llevo un año en Alemania y a estas alturas hablo razonablemente bien, entiendo ya la televisión y aunque hago faltas, escribo y leo decentemente. Tengo que mejorar pero tengo un método infalible: primero un curso intensivo de seis meses (cinco horas al día, cinco días a la semana). A partir de ese nivel se es ya suficientemente autónomo. A partir de ahí con solo una hora al día (no es mucho)... se puede todo. No es tan revolucioario como el método pero... funciona. Un saludo y ánimo.
una vez soñé que para aprobar un examen sin estudiar tenía que chupar todos los conocimientos de mi profesor con una pajita. Y eso hice, me pedí en la cantina un cráneo del profe de filosofía y a chupar, otros tenían el craneo del de física, o el de la de matemáticas, según el examen que tuvieses. Sabía asqueroso. Una mezcla de batido de sesos y serrín.
Otro día soñé que tenía dentro del ojo una integral de "e" elevada a menos "x", que por cierto no existe, pero bueno ese ya es otro sueño.
Al grano, que me ha gustado mucho la historia de Joseph McAllen. Un tipo curioso. Me gustaría conocerlo. Igual voy esta tarde a Nebraska.
¿Y dónde irían las academias de idiomas?, ¿más paro quieres??
Vengan manos a mi cuerpo que enriquezcan mi currículum...
Una corrección: Nebraska no está en EEUU, sino en Cádiz. Increíbles sus tapas de caracoles. :D
Un abrazo.
La iglesia censurando hasta en la ficción.
Posees un don increíble cuídalo y sigue imprentándonos ( haber si con suerte se no pega algo)
Un besillo.
Que placer leerte Fer... ainss, que cierto, cuantos idiomas han pasado bajo mis manos, tantos y tantas como vidas... Besossss
Que bueno... como siempre.... sorprendente...
Puede ser un aliciente para aprender idiomas... Además parece que engancha. Puede ser una reacción en cadena.......
Un saludo...
Dudo que tanto interés tenga que ver con el querer saber idiomas si no mucho más con el de querer acariciarse.
Has escogido el discurso periodístico, has envuelto al relato en una manta de objetividad, lo cual me parece indispensable si tenemos en cuenta el contenido de la noticia. Notable. Un abrazo.
Cómo se te ocurren estas cosas, geniecillo. Creo que me iré a Fremont a conocer al tal McAllen ;)
Genial! Ahh si todos pudiéramos aprender lenguas así mi vida sería distinta como la de los habitantes de ese pueblito. Encontrarte y leerte es una experiencia. Me llevo tu link y ya tienes un seguidor más. Volveré no lo dudes, ya no te pierdo. Un abrazo, josef.
cuánto lo eché de menos en mis años de bachillerato!!
Buenísimo el estilo periodítico de este texto Fer! un placer estar de vuelta!
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