El hombre como debe ser
“El hombre como debe ser, que no dispone de patrimonio, debe estar ricamente dotado por la naturaleza. A este respecto podría desarrollar aquí muchas y nuevas ideas que ni los moralistas ni los filósofos, mis predecesores, han abordado.
[...]
Independiente de estos elementos de propiedad que, si se quiere, pueden tomarse en consideración, existen otros más reales y más incontestables, como por ejemplo:
Tener entre treinta y cuarenta años:
Medir entre metro setenta y metro ochenta;
Tener una dentadura de treinta y dos dientes bien blancos;
Una salud de hierro;
Un estómago de bronce;
Riñones y puños vigorosos;
Unas patillas tupidas;
Una pantorrilla de seis pulgadas de diámetro”.
Anónimo francés, El arte de acumular deudas y no pagarlas, 1882 (edición en Sequitur, Madrid, 2009).
7 comentarios:
Vaya con el deudor (ahora ya se llevan más altos).
Sí, pero... ¿y si luego resulta que ese hombre cumple todos esos "requisitos" y no gusta?
Ay el gustar... ahí está la cuestión.
Besets
Qué sabio francés. Lo de la dentadura es muy pero que muy importante.
Besitos!
Lo de la pantorrilla me ha dejado k.o.
Lo que las mujeres le suelen llamar "un hombre que me haga reír"
jajajja, eso, eso, Ixilik lo ha sintetizado muy bien, jajaja.
Oyess y lo del puño, pá qué?? :O
Besoss
Ay! Fallo en la dentadura. Por poco... Bueno tal vez las patillas también podría llevarlas más túpidas. Me pongo a ello. Si ya me lo recomendaba mi abuelo...
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