Luz (I)
En la ventana había quedado una ranura abierta. Entraba una brizna de sol y ella, dejando de prestar atención a los juguetes por un momento, se quedó mirando, ensimismada. En el rayo de luz flotaban sin rumbo cientos de motas de polvo
- ¿Qué son esas cosas, papá?
Qué cosas, le pregunté curioso.
- Esas cosas que hay en la luz.
Me costaba entender, así que me levanté y me puse a su lado, desde donde, ahora sí, podía ver mucho mejor el rayo de sol y las motas de polvo que flotaban. Entonces comprendí.
Son los señores de la luz, le dije. Ella abrió aún más sus ojos verdes e inmediatamente quiso atrapar alguna de esas partículas que se movían inquietas en el aire.
Espera, no los molestes, le avisé. A los señores de la luz no les gusta que les interrumpan cuando están viajando. ¿No ves que cuando acercas la mano se mueven mucho más rápido?
- ¡Es verdad!
Y se alejó un poco. Entonces las motas de polvo recuperaron la calma y continuaron su tranquilo deambular por la habitación.
- ¿Y a dónde van los señores de la luz, papá?
Si quieres les preguntamos, propuse.
10 comentarios:
¡qué bonito!
Cuando te contesten, me dices, que llevo anhos tratando de averiguarlo.
Llevo años queriendo saber su destino, creo que quizás me una a ellos..¿Hay señoras de la luz?
un besito Fernando!
Díselo tu ahora. Y díselo de una manera poética, porque dentro de unos años correrá tras lo señores de la luz con el paño del polvo en la mano, maldiciendo...qué tenga , al menos, una rendija de ternura en su recuerdo...
No me acuerdo del título, pero leí hace tiempo un cuento de unos niños morían ahogados en luz por no querer apagarla para dormir.
Besos.
Alimentar la magia, que buena propuesta!!!
Besos.
Los señores de la luz son hermosos , y alegres, mientras bailan en la luz. El problema es cuando mueren sobre las lámparas y apagan la música, que les hacía bailar.
yo tambien hice esa pregunta de pequeña pero la respuesta no fue tan poética
:_)
Qué sencillez más agradable. ¿Sería bueno para los niños que la magia existiese y nunca supieran la verdadera y monótona explicación de las cosas?
Quien enseña la magia de las cosas a los niños, sabe de la complejidad de las respuestas... y de la necesidad de alimentar algunos misterios mediante la imaginación.. para huir de la rutina y el aburrimiento.
Publicar un comentario