Y ahora
Allá
en el fondo de tus ojos,
instantes antes de cerrar los míos,
paz verde y luz dormida
Ángel González
instantes antes de cerrar los míos,
paz verde y luz dormida
Ángel González
Y ahora que todo es demasiado grande, no encuentro entre
mis palabras nada que se te acerque. Quisiera ser Ángel González y poder dar
lecciones de buen amor y decir que para qué, si las frases son inútiles, si ser
espía de palabras es absurdo cuando lo que quisiera –y ya está, y nada más– es
llegar a tu cuello con mi boca.
Y ahora que vamos a entrar en nuestras murallas a sembrar
recuerdos me da por hojear libros y repasar fiestas y qué pena. Sí, qué pena
que no estuvieras en todo esto, porque ahora lo que nos queda
El resto de la vida
Me parece poco.
Y ahora pienso que tardamos mucho en encontrarnos, por
ser escrupulosos, quizás, o por buscar motivos de orgullo, o por no saber
arrojarnos de trampolines demasiado altos, no sé.
Y ahora, que nos queda
El resto de la vida
Qué pena haber estado lejos y no saber encontrar entre
mis palabras nada que se te acerque.
Porque ahora, que vamos a entrar en nuestras murallas, y
que sólo nos queda
El resto de la vida
Mejor dejar de perseguir palabras que se te acerquen porque
para qué, si lo que quiero es llegar otra vez a tu cuello con mi boca, y que lo que nos queda
El resto de la vida
Me parece poco.
El resto de la vida
Me parece poco.